¿Qué es la Medicina Antienvejecimiento?

Desde el principio de los tiempos el ser humano ha intentado, por todos los medios, prolongar su vida, dedicando a ello grandes esfuerzos y gran cantidad de recursos a lo largo de la historia. Pero es desde hace relativamente poco tiempo, cuando se puede conseguir retrasar nuestro reloj biológico con una base científica y sobradamente contrastada. Y este es el objetivo de la Medicina Antienvejecimiento o Antiaging: retrasar los signos propios del envejecimiento y proporcionar las herramientas, soluciones y actitudes necesarias para que la calidad de vida del individuo se mantenga en un nivel óptimo, aunque éste vaya envejeciendo cronológicamente.

El propósito de este área, el de la medicina antienvejecimiento, es el de ralentizar el proceso de envejecimiento y reactivar el potencial de salud de cada persona, no solo previniendo ó revirtiendo el envejecimiento prematuro tras diagnosticar sus causas, sino también provocando una estimulación y reconstrucción natural de los distintos procesos y sistemas metabólicos necesarios en cada caso particular, con el fin de disfrutar de esta etapa de la vida con salud y vitalidad, evitando las enfermedades y malestares que el envejecimiento suele conllevar.

¿Por qué envejecemos?

El envejecimiento es un proceso fisiológico que deteriora las funciones, órganos y tejidos del organismo. Es lento e inevitable y comienza a notarse, por lo general, a partir de los 35 años, caracterizándose por un mayor tiempo de recuperación tras realizar un esfuerzo físico, pérdida de masa muscular y ósea, aparición de artrosis, deficiencias hormonales, diabetes, arterioesclerosis y enfermedades del corazón, etc.
No aparece en todas las personas a la misma edad ni se desarrolla con la misma velocidad. Conviene diferenciar la edad cronológica, que viene marcada por la fecha de nacimiento de cada uno, de la edad biológica, que depende de cada persona, de su actitud ante la vida, de los hábitos de riesgo que mantiene y de un componente genético aun no bien conocido.