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Vaporización Próstatica Bipolar con Energía Plasmaquinética

La vaporización prostática bipolar con energía plasmaquinética es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo para el tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata (HBP).

La HBP consiste en el desarrollo de un tumor benigno, conocido como adenoma de próstata, que crece hacia la uretra obstruyéndola, condicionando la aparición de síntomas molestos relacionados con la micción.

Beneficios de la intervención

Este procedimiento evita el sangrado operatorio, reduce al máximo el tiempo de llevar sonda y tiene un mínimo riesgo de que el paciente sufra síntomas de impotencia, ya que no se alteran los nervios ni los vasos que participan en la erección. Igualmente, no existe riesgo de incontinencia de orina debida a la intervención, ya que se trabaja con cámaras de alta definición.

El tratamiento se realiza, en la mayoría de los casos, de forma ambulatoria, no siendo preciso el ingreso hospitalario y siendo la recuperación del paciente más rápido y con menos molestias.

Descripción técnico-médica

La vaporización prostática bipolar con energía plasmaquinética consigue la vaporización del tejido prostático de una forma idéntica a la utilización del láser KTP aún cuando la energía utilizada es muy diferente.

La intervención

Tras administrarle una anestesia epidural y sedación, se introduce una vaina a través de la uretra y la pone en contacto con la próstata. Mediante la energía plasmaquinética se vaporiza el tejido prostático consiguiendo en 40-60 minutos eliminar el tejido anormal y abrir la salida de la vejiga para obtener una micción normalizada.

Dependiendo del tamaño de la próstata y de su estancia en Alicante, es aconsejable permanecer un día ingresado en el hospital para beneficiarse de una asistencia profesional especializada.

Medidas pre-operatorias

  • Estudio detallado de su historial médico para decidir los detalles de su intervención
  • Será visitado por el anestesista quien le explicará la técnica anestésica que se utilizará
  • No debe tomar alimentos sólidos ni líquidos durante las 5-6 horas previas a la intervención
  • No debe llevar ropa interior, ni prótesis dentales móviles. Tampoco objetos metálicos (anillos, pulseras, pendientes, piercing, etc.)

Cuidados post-operatorios

  • Se le realizará un lavado vesical a través de la sonda que usted tendrá puesta durante un plazo máximo de 24 horas. A través de este lavado irá eliminando los restos que puedan quedar en la vejiga de la orina
  • A las 6 horas podrá comenzar a ingerir líquidos por la boca. Se recomienda beber especialmente agua: entre 2 y 3 litros al día
  • Se le administrarán calmantes si tiene molestias
  • Deberá mover los pies y doblar y estirar las rodillas para favorecer la circulación de la sangre
  • No se le dará de alta hasta que haya orinado al menos una vez
  • Las primeras micciones producen un discreto escozor y una orina sonrosada que paulatinamente irán desapareciendo
  • Al alta se le entregará un informe médico con la fecha de visita de seguimiento con su médico y una receta con el tratamiento a seguir
  • El proceso de cicatrización requiere entre 2 y 4 semanas, durante las cuales sus micciones pueden resultarle levemente molestas, aunque ello no requiere de un tratamiento especial
  • Tras el alta, se aconseja hacer vida tranquila, beber abundante líquido, no tomar medicamentos anticoagulantes y controlar la tensión arterial

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